Necesidades olvidadas

Algo que impulsa, inquieta, revolotea en la mente de pronto. Empujado por diversos y casuales estímulos auditivos, visuales, sensacionales sensaciones...

Y pienso... Siento... necesidad ingenua, simple, humilde, profunda... De conectar en ese instante con una reciprocidad cercana... De esas que hacen sentir calor... Aun en el mas intenso frío... En la mas lejana distancia...

Un aparato que conecta en cualquier instante, con cualquier persona importante... Esté donde esté en ese momento exacto... Una larga lista de personas que viven la misma realidad, y sin embargo ninguna a la que este esqueleto conducido por una espiral de incongruencias, sienta receptiva para dos simples vocablos de sensaciones concentradas, de deseos quizá...

Que sentido le darán mas allá del tan puro y simple, te recuerdo cuando sonrío y eso hace que sonreir cobre aun mas sentido...

Todo esto es un montaje... Algo o alguien nos ha gastado una broma... Estúpidos monigotes manipulables, volubles, frágiles, débiles, insulsos... Mentes que no sabemos doblegar, que no sabemos interpretar, aprovechar...

Potencial impotente ante las posibilidades...

No decidí a quién... No estabas en mi lista... Pero ahora, justo ahora, necesitaba decirte, que te quiero.

Compartir contigo sensaciones de ternura, comodidad extrema, bienestar, respiraciones relajadas que saborean el oxígeo cálido impregnado de mi propio olor mezclado con el de la infusión caliente preparada por mamá... pies inquietos por el suave roce de la geografía de temperaturas variables de las sábanas... Pensamientos de infancia... Ingenuidad, relajación...

Esquivo lo supuestamente importante, atenúo su opacidad para ver las capas subyacentes... Las importantes de verdad...

Quería que sepas que me siento bien, que sueño, que toco, que siento, que veo, que huelo, que lloro, sonrío, lo cojo todo y lo mezclo...

Y me marcho a dormir...